1. Se fomenta el lenguaje y la comunicación.
2. Ayuda a desarrollar actividades físicas sociales y emocionales.
3. Es un factor determinante en la personalidad.
4. Desarolla actividades intelectuales.
5. Estimula su creatividad y ayuda a descubrir sus capacidades.
Cuando se juegue con el niño el padre de familia o el terapista debe integrarse y dividirse, y tratar de evitar que el adulto se adueñe del juego.
2. Ayuda a desarrollar actividades físicas sociales y emocionales.
3. Es un factor determinante en la personalidad.
4. Desarolla actividades intelectuales.
5. Estimula su creatividad y ayuda a descubrir sus capacidades.
Cuando se juegue con el niño el padre de familia o el terapista debe integrarse y dividirse, y tratar de evitar que el adulto se adueñe del juego.